Tras tres temporadas en pos de la Némesis de Patrick Jane, John el Rojo, el despiadado asesino serial que acabó con su mujer y su hija… la CBS ha decidido desvelar quién es. Bueno, desvelar es mucho decir ya que a este Red John no le habíamos visto asomar el flequillo en ningún capítulo anterior, lo que es como si en Asesinato en el Orient Express el culpable  fuera el taxista que llevó a Poirot a la estación y del que sólo vimos la gorra.

Lo que no se puede negar es que la season final fue espectacular y  nos tuvo en tensión  90 minutos, aunque nos lo debían, porque nos habíamos tragado 22 capítulos previos bastante sosos, con escasas alusiones a la carita sonriente. Salvo el affair Hightower, el Mentalista fue un procedimental más con algunos momentos geniales de Patrick como titiritero y algún diálogo borde entre Cho y Rigsby. Este último, otro de esos americanos -junto a Mark Valley -en los que se inspiró Pixar para Buzz Lightyear .

En ‘Strawberries and Cream’ descubrimos que el topo de Red John en el CBI era el novio de Van Pelt. Toda una sorpresa para los actores que interpretaban la escena porque el resto de los mortales estábamos seguros de que esta chica no se casaba con el  guapochicoqueapareciódelanada del FBI. Por cierto muchacha, a ver si espabilas que llevas dos novios psicópatas  y vas a igualar la marca de Debra Morgan. ¿Y vosotras sois polis?

Poco que añadir sobre  este ignoto Red John, un sujeto de voz meliflua y parecido a Morrissey que, salvo giro sobrenatural, no volveremos a ver en la cuarta temporada donde se intuye que Patrick en la cárcel va a perder la hidratación de sus mechas.